Pagoda de Shwedagon, un imperdible de Yangón (Foto Flickr) |
Ese país es
Myanmar. Sí, el territorio antes conocido como Birmania, incrementó en los
últimos años el número de turistas que lo eligen.
Atraen los
encantos de su cultura, su arquitectura religiosa y sus paisajes.
A pesar del aumento de visitantes, la oferta hotelera y de servicios no crece al mismo ritmo. Pero igual vale la aventura de conocerlo.
¿Por donde empezar? Las guías de turismo coinciden en
recomendar las ciudades de Yangon, Bagan y Mandalay así como el lago Inle. Existen también otras regiones abiertas al turismo, pero aun es incipiente.
Myanmar tiene cerrados todos los pasos fronterizos. La única manera posible de entrar al país es por aire Cuenta con dos aeropuertos internacionales: Mandalay y Yangon.
Lo qué no podés dejar de ver en Yangón
Yangón,
también llamada Rangún, es la ciudad más grande del país. Fue su capital
hasta 2005, condición que ahora recae en Naipyidó En Yangón está uno de los aeropuertos
internacionales por lo que es una de las principales puertas de entrada al
país.
Las atracciones parecen ser muchas. Por citar solo algunas mencionaré las Pagodas de Shwedagon, imponente
complejo religioso de más de 2500 años, y de Chauk Htat Gyi, reconocida por su
imagen de Buda reclinado.
Imagen de Buda reclinado en la pagoda de Chauk Htat Gyi (Foto Flickr) |
Agreguemos a la lista Musmeah Yeshua, la única
sinagoga judía que queda en Myanmar, catalogada como patrimonio arquitectónico
de la ciudad.
Sinagoga Musmeah Yeshua, único templo judio en un país budista (Foto Flickr) |
Como curiosidad, se puede hacer un recorrido de tres horas en el
pintoresco Yangon Circular Train para conocer la auténtica ciudad, por
fuera del circuito turístico.
¿Estás listo para conocer Bagán?
Bagán, conocida como la ciudad de las 1000
pagodas, es la más elegida por los turistas.
El Templo
de Ananda, una maravilla arquitectónica construida en 1091, es un ícono de la ciudad y uno de los
sitios mejor conservados.
Templo de Ananda, en la ciudad de Bagán (Foto Flickr) |
Para movilizarse dentro del país, en general el medio más usado es el autobús. Hay conexiones nocturnas entre ciudades, que nos ayudan a reducir costos de alojamiento. Dentro de las ciudades se puede recurrir al autobús de línea o taxi. Una opción económica es alquilar una bicicleta, pero no olvidemos que las temperaturas suelen superar los 35° C y pedalear no será tarea fácil.
También se destacan el Templo de Dhammayangyi la estructura más grande de Bagan, el Templo de Thatbyinnyu y la pagoda de Shwezigon, en el pueblito de Nyaung Oo, a 5 kilómetros de la ciudad de Bagan.
Myanmar conjuga el exotismo de los países del sudeste de Asia, una cultura milenaria que recién se abre al turismo extranjero y la posibilidad de vivir un viaje de aventura. En una próxima entrada conoceremos más de este intrigante país.
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